Uno de los trabajos que requieren de mayor estudio histórico dentro de la arquitectura es la restauración. En este artículo, nosotros te platicaremos más sobre algunas de las características de este trabajo y cuáles son las claves para poder realizarlo de forma adecuada.
¿En qué consiste?
Desde hace años, hemos sido testigo del deterioro de varias construcciones arquitectónicas. Esto se hace debido a que el paso de los años, va dañando los materiales con los que fueron construidos, es por eso que todas las construcciones necesitan de un buen mantenimiento que puede ir desde la limpieza de la fachada, la reconstrucción de algunos de sus elementos e incluso, la reparación de ellos dependiendo del estado de la misma. Esto se conoce como restauración arquitectónica el cual es un concepto que por lo general se liga de inmediato a los monumentos o edificios históricos. En efecto, la restauración tiene como objetivo poder conservar el patrimonio recuperando edificios que han sido deteriorados por muchas circunstancias con la finalidad de poder conservar la cultura.
La labor de arquitectos restauradores va más allá de únicamente restaurar obras como lo son catedrales, iglesias u otros monumentos tradicionales dentro de la arquitectura histórica. También la arquitectura contemporánea da pie a que se pueda seguir implementando lo que conocemos como restauración arquitectónica.
Esta especialidad se basa en poder recuperar como ya lo mencionamos y también conservar parte de las obras construidas años atrás. Algunas de estas construcciones, son consideradas de gran importancia y con un gran valor histórico ya que se tienen que contemplar las técnicas y materiales adecuados para poder hacer este trabajo de forma correcta.
Los profesionales que se dedican a esta especialidad de la arquitectura, son los encargados en poder devolverle la vida a las edificaciones que han sido construidas muchos años atrás, incluso, siglos. Es una de las especialidades que más demandan conocimientos detallados de la obra original para poder hacer una restauración de forma adecuada y delicada para cuidar cada uno de los aspectos y elementos de la obra inicial.
¿Qué es?
La restauración arquitectónica es una de las especialidades que tú puedes elegir para poder desarrollarte como arquitecto. Es importante que tengas en cuenta que la restauración es de las especialidades más completas que existen ya que esto tiene como finalidad poder preservar en un buen estado las edificaciones históricas que existen en las ciudades del mundo. También se puede definir como uno de los procesos más completos que tienen como objetivo inicial el poder restablecer o devolver la integridad de la construcción pese a su edad.
En algunas ocasiones, uno de los objetivos principales de la restauración arquitectónica es que la construcción pueda tener un valor histórico que pueda hacer que pertenezca al patrimonio cultural de la ciudad o país donde se encuentre, es por eso que debe conservar el uso para el cual se concibió en un inicio. Por ejemplo, estos usos pueden ser un teatro e incluso, un museo. Es por eso que muchas de las construcciones que se han restaurado, se modernizan en cierto modo para poder incluir nuevos elementos pero sin perder parte importante de sus aspectos esenciales.
Cabe señalar que este tipo de procedimientos se tendrán que basar en la historia y en la estética de la construcción para así poder determinar cuál es el proceso constructivo adecuado o las técnicas que se tendrán que seguir para poder restaurar las obras arquitectónicas. Se tienen que tomar en cuenta para esto varios factores importantes como por ejemplo las causas climatológicas que han deteriorado algunos de los materiales o el mismo desgaste natural de los mismos por el paso del tiempo. Es por eso que cada una de las obras que se restauren , van a tener sus técnicas especializadas dependiendo de las características de la misma.
Conceptos principales
Como ya hemos mencionado con anterioridad, los edificios son construcciones que necesitan siempre de un buen mantenimiento para que el paso de los años no los maltrate ni mucho menos el uso que se les de. El tipo de restauración que se necesite, va a depender mucho de las necesidades que va a tener el edificio y de otros aspectos importantes como el estado en el que se encuentre la construcción, el tipo de maquinaria y materiales que se tengan que utilizar para poder llevar a cabo este tipo de trabajos. A grandes rasgos, podemos mencionar tres tipos de restauración principales las cuales son:
La limpieza que básicamente se enfoca en la fachada del edificio, esta se lleva a cabo por lo general en los edificios de las grandes ciudades que necesitan este trabajo debido a la contaminación que llegan a almacenar de las fábricas o de los mismos vehículos.
La reparación es otro tipo de restauración que se necesita cuando los elementos arquitectónicos ya han sido muy deteriorados ya sea por el uso que se les haya dado o por el paso del tiempo. Por otro lado encontramos la sustitución la cual se basa en la reconstrucción de los elementos arquitectónicos como tal ya que no es posible llevar a cabo una reparación por los daños que ya tienen.
Cabe señalar que es importante saber que no todos los edificios se van a restaurar con un mismo patrón ya que va a depender de varios factores como lo es el diseño de la construcción y cuáles son las necesidades que se tenga con la misma edificación.
Factores importantes a tomar en cuenta
Uno de los objetivos más fascinantes de la restauración arquitectónica, es poder recuperar lo que se ha maltratado o destruido por el tiempo o por las malas condiciones climatológicas a las que haya estado expuesto. Esto hace que sea una de las herramientas más importantes para poder conservar elementos que son importantes para la cultura de varias regiones en el mundo. Es por eso que se deben tomar en cuenta las necesidades actuales también que se tengan pensadas para el edificio en nuestros días, para esto se tendrá que hacer un análisis para saber si será necesario colocar servicios o instalaciones actualizadas para llevar a cabo estas nuevas funciones dentro de la construcción.
Uno de las problemáticas más comunes dentro del ámbito de la restauración es que se pueden llegar a presentar dentro de las intervenciones complicaciones que implican la restitución de las partes o algunos de los elementos perdidos. Para esto, el profesionista que se encuentre a cargo de la restauración arquitectónica del proyecto, va a tener que realizar un ejercicio personal donde la creatividad del mismo le va a poder permitir balancear las características de la arquitectura antigua y la moderna.
Durante estos últimos años se han tenido varias concepciones de la relación que se tiene con lo histórico de la arquitectura contemporánea y lo antiguo, lo cual ha derivado un largo debate moral que desde siempre ha existido dentro de la restauración arquitectónica incluso ya como una práctica profesional.
Las intervenciones de los edificios consistían anteriormente en el lenguaje arquitectónico que se tenía en ese momento, a veces, con escasas referencias de la arquitectura. De aquí se desprende otro reto, el cómo intervenir en la construcción y poder completar por decirlo de una forma las partes con las que ya no cuenta la construcción.
¿Cómo se realiza una restauración arquitectónica?
Una restauración arquitectónica va siempre más allá de un simple proceso de renovación de la misma estructura con la que fue construida. Antes de poder dar inicio con los trabajos de restauración de las diferentes obras, se tiene que tener un análisis histórico del sitio donde se está llevando a cabo el proyecto arquitectónico. También se tiene que tener un análisis contextual de la edificación en cuestión.
Básicamente no vamos a poder intervenir en las construcciones sin antes tener en cuenta cómo es que se construyó esa edificación independientemente de la antigüedad que tenga. Para esto debemos saber bajo qué tipo de procesos constructivos se llevó a cabo y también parte del contexto histórico que tiene esa obra arquitectónica.
Una vez que las personas indicadas para el trabajo de restauración ya pudieron elaborar este tipo de análisis, se va a conseguir un diagnóstico con el cual vamos a poder planificar los diferentes trabajos y procesos que se tienen que tomar en cuenta para poder llevar a cabo la restauración o la renovación de la construcción que se tenga en el proyecto. Otro punto importante que no debemos pasar por alto es que los trabajos de restauración siempre se deben realizar con conjeturas o analogías ya que básicamente, siempre deben estar sustentados bajo bases históricas y evidentes que ayuden a que no se altere el proyecto original.
Tratamiento estructural
El tratamiento de una restauración siempre se debe realizar como se realiza un proyecto constructivo, de abajo hacia arriba. Esto se traduce en que la mayoría de las restauraciones se inician con la parte estructural del proyecto para que la estructura en sí, se encuentre fuerte desde un inicio.
Esto claramente va a depender del grado de desgaste que tenga la obra en cuestión e incluso el deterioro que presente la misma. Es por eso que desde aquí podremos partir para saber qué tipo de tratamiento se le van a dar a las fallas estructurales con las que cuente el proyecto. Dichas fallas pueden ser superficiales o pueden necesitar de una mayor intervención para poder mantener de pie la construcción y así prevenir también futuras fallas que pueda tener la estructura las cuales puedan resultar graves.
Patologías Constructivas
En caso de que la construcción presente humedades o algún problema como estos, debemos primero que nada sellar todas aquellas filtraciones para poder hacer el drenado de forma correcta del agua de lluvia y así poder evitar la humedad en los muros o en otros elementos que sean parte importante de la misma estructura.
Otra parte importante que no debemos olvidar es el resanado. Es por eso que debemos prestar atención a detalles en los acabados o en las fachadas ya que en varias ocasiones, la estructura se encuentra en muy buenas condiciones, solamente son detalles que se pueden revertir en poco tiempo dependiendo de las características del proyecto. Para esto, se tiene que llevar un proceso de resane de muros, pisos y techos si es que el proyecto lo necesita. Todos estos procesos, se deben hacer con mucho cuidado para poder evitar que se intervenga demasiado en las construcciones ya que se trata de construir al máximo la identidad de la obra y también la integridad de la misma. Siempre se tiene que tomar en cuenta los elementos principales de las construcciones para que no pierdan sus sellos más importantes que las distinguen de los demás proyectos arquitectónicos.
Para esto debemos analizar y tener conocimientos de materiales tanto nuevos como antiguos para saber cómo podremos replicar esos acabados en la actualidad. Del mismo modo, debemos saber cómo aplicarlos con ayuda de técnicas constructivas adecuadas que no vayan a perjudicar la estructura como tal.
Recuperar, conservar o readaptar
Una de las características que más distinguen a la restauración arquitectónica, es que no siempre se van a realizar los mismos procesos o técnicas constructivas en todos los edificios ya que todo dependerá de muchos factores que se deben considerar antes de dar inicio con el proyecto de restauración arquitectónica. Entre estos factores, podemos encontrar el grado en el que está deteriorada la obra, la antigüedad de la misma y algunas de las figuras jurídicas que lo protejan para poder empezar con el proyecto.
Hablando de forma muy general, podemos entender a la restauración de edificaciones de tres formas distintas, entre ellas encontramos la recuperación la cual busca inicialmente poder recuperar el aspecto inicial del edificio original. Esta tiene la finalidad de poder lograr una reproducción casi exacta de cómo fue cuando recién fue construido. Para esto se tiene que contemplar el tipo de materiales, las formas con las que fue construido e incluso los elementos arquitectónicos con los que contaba en un inicio. Para esto, los restauradores profesionales van a tener la tarea de hacer que sus intervenciones se noten pero que no sean tan obvias, el objetivo de esto es poder tener la sensación de estar viendo el edificio como si estuviera recién construido pese a la antigüedad que tenga el mismo.
Por otro lado la conservación pretende evitar que la construcción se deteriore a través de los trabajos de conservación que se necesiten dependiendo del trabajo. Estas intervenciones se deben apreciar para dar la sensación de que han sido implementadas con las técnicas arquitectónicas de la construcción original. Por otro lado, la readaptación se basa en intervenir de forma creativa en las construcciones incorporando estilos vigentes en la actualidad al momento de la restauración.
Fases de una restauración arquitectónica
Sea cual sea el tipo de restauración que hayamos elegido, en todo proyecto que sea de este tipo se deberán contemplar las siguientes fases:
Primero que nada se debe analizar el deterioro de la construcción para poder saber con certeza el tipo de patología constructiva que se tiene que reparar y poder así proponer las mejores soluciones para los mismos. Esta primer fase, deberá estar acompañada por un proceso de documentación que nos pueda ayudar a conocer de forma profunda la historia y las características de la construcción para poder tener más en claro el aspecto original del mismo. En esta parte pueden sernos de gran ayuda profesionistas como paleógrafos e historiadores para que nos brinden características importantes del contexto histórico de la construcción arquitectónica o monumento con el que se vaya a trabajar.
La financiación es también una de las partes más importantes del trabajo dentro de un proyecto de restauración ya que con esto podemos ayudarnos a poder realizar correctamente la recuperación de la obra con la cual estemos trabajando. Una vez que se tengan completos estos dos primeros aspectos, podremos dar inicio con los trabajos de restauración necesarios para el proyecto, con esto se le podrá dar el seguimiento adecuado por si la obra no se da por terminada por cualquier razón para poder atender consultas e incluso reclamaciones si fueran necesarias.
Claves para poder lograr una buena restauración arquitectónica
Unas de las claves más importantes para poder hacer este tipo de trabajos que impliquen la restauración arquitectónica, se deberá entender primero el valor histórico y arquitectónico de las piezas para saber así cómo es que se tienen que trabajar y las técnicas que se van a tener que implementar.
Una vez que nosotros establecemos el valor histórico del mismo, se deberá hacer una calificación de la obra pata saber qué elementos son los que pertenecen a la construcción original y así determinar qué tipo de elementos o materiales le han sido agregados con el paso de los años o siglos desde que se haya construido. Posteriormente las personas que estén a cargo de la restauración arquitectónica del proyecto van a poder hacer las evaluaciones correspondientes para poder decidir así cuáles son los elementos que no son originales, cuáles se quitarán y cuáles de ellos se van a poder conservar.
Analizar el uso que le van a dar a la construcción arquitectónica, nos ayudará a determinar cuáles pueden ser algunas de las intervenciones contemporáneas que se podrán contemplar dentro del proyecto.